Greenpeace sobrevuela las sierras y documenta la magnitud de los incendios en la provincia de Córdoba, donde se quemaron 50.000 hectáreas de bosques nativos en dos semanas. Provocados por la actividad humana negligente o intencional para desarrollo inmobiliario y agropecuario, y agravados por las sequías y el cambio climático, los incendios que se repiten en varios puntos del país evidencian la desprotección de nuestros bosques y humedales. En este sentido, la organización ambientalista advierte que las multas son insuficientes para desalentar incendios intencionales y desmontes y reclama que se los catalogue como delitos penales y se obligue a la restauración a quienes sean responsables © Sebastian Salguero / Greenpeace